Tirso vino al mundo en el garaje donde su madre buscó cobijo cuando sintió que se acercaba
el momento del parto y allí vio como todos sus hermanos encontraban un hogar junto a
familias humanas, mientras él era rechazado, tal vez por ser más tranquilo y llamar menos la
atención, tal vez por su color negro marcado, aún en nuestros días, por la ignorancia y la
superstición.
Y todos se marcharon y él se quedo solo en la oscuridad de aquel garaje hasta que un día,
siendo aún un bebé, con apenas tres meses de edad, el pequeño Tirso fue arrojado a la calle,
encontrándose de pronto perdido, desamparado y aterrado en un mundo desconocido y lleno
de peligros. Durante meses sobrevivió como pudo a la intemperie, padeciendo el frío helado y
el calor abrasador, el hambre, la sed y la enfermedad, siempre solo, siempre asustado,
siempre buscando el contacto con humanos para pedirles ayuda con un suave maullido que
era su grito desesperado. Pero nadie escuchaba, hasta hoy…
Ahora buscamos para él una familia que sepa ofrecerle el cariño y los cuidados que merece y
nunca tuvo, que le devuelva la alegría y la ilusión de vivir y cure las heridas que la traumática experiencia del abandono dejó en su cuerpo y en su pequeño corazón.
Tirso es un gato joven de unos diez meses de edad, extremadamente dulce y amoroso pese al
sufrimiento que arrastra y con una hermosa mirada verde, profunda y transparente que habla
por sí sola y emociona a quien la recibe.
Es positivo en leucemia y rinotraqueitis, pero también es un chico fuerte y luchador, que con
los cuidados apropiados puede llevar una vida completamente normal. Sólo necesita que
alguien le de una oportunidad para ser feliz.
Urge encontrar un hogar porque ahora Tirso espera en una pequeña y fría jaula dentro de una
habitación oscura, espera a alguien como tú para compartir toda una vida juntos.
¿Quieres adoptar a Tirso y ser su familia?
¿Puedes ofrecerle casa de acogida hasta que encuentre su hogar definitivo?
Tirso se encuentra en Aranda de Duero (Burgos)
Contacto: akuena73@hotmail.com
