Según han informado fuentes del instituto armado a 20 minutos, el pasado mes de agosto recibieron una denuncia alertando sobre la posibilidad de que existieran animales en mal estado en una parcela situada en la localidad de La Font d'En Carròs (Valencia).
Inmediatamente, varios agentes del Seprona investigaron la parcela y descubrieron un zulo de 15 metros cuadrados. En su interior, hallaron 48 perros, la mayoría galgos y podencos, hacinados, sin ventilación y con una elevada temperatura y humedad. Además, estaban atados con cadenas o cuerdas de unos 30 centímetros, lo que les obligaba a permanecer tumbados sin poder levantarse ni andar.
Ante estos hechos, la Guardia Civil requirió los servicios de un veterinario para que elaborara un informe detallado sobre el estado de todos y cada uno de los canes. Según las mismas fuentes, el informe concluye que todos ellos tenían diversas enfermedades supuestamente derivadas del abandono y maltrato sufrido, algunas de las cuales eran de carácter grave.
Ante esta situación y una vez conocidos los detalles del Certificado Veterinario Oficial, el Seprona ha instruido diligencias por un supuesto delito de maltrato de animales de compañía, el que está implicado C.D.M, de 64 años. Las diligencias serán entregadas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Gandía.
Tras la intervención de los agentes, los perros fueron recogidos por diversas protectoras de animales que se hicieron cargo de ellos para su mejor cuidado. Desde una de ellas, Modeprán, han exigido que se le imputen al acusado "48 delitos de maltrato animal en lugar de uno, es decir, uno por cada perro dañado". Según esta protectora, este tipo de delito está penado con una condena de tres meses a un año de cárcel, mientras que por la vía administrativa, se traduciría en una multa de 6.000 a 18.000 euros.
Vía: http://www.20minutos.es/
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